Debido a su situación de aislamiento natural posee un enorme interés geológico, botánico y faunístico. La finca está abierta a todo el que quiera disfrutar de este bello rincón de Gran Canaria, aunque existen algunas limitaciones.

• Senderismo: es la actividad más realizada dentro de la finca y no requiere de permiso, siempre y cuando no se trate de senderismo organizado, en cuyo caso sí requerirá de autorización administrativa.
• Acceso rodado: existe una pista de tierra de 18 kilómetros que atraviesa la finca a la cual se puede acceder en vehículo, moto o bicicleta con permiso previo. Este acceso está restringido a un número máximo de 10 vehículos a motor/día y 50 bicicletas/día. 

Se debe tener en cuenta que los días de caza la pista está reservada para esta actividad. Los días son los jueves y domingos en el periodo comprendido entre agosto y noviembre.

Senderos del entorno de la Finca de Tirma

Normas de uso y acceso a la Finca

Un valor natural incalculable.

La finca ocupa un espacio que va desde la costa hasta los 1.200 metros de altitud y cuenta con una superficie de 2.000 hectáreas que forman una parte importante del Parque Natural de Tamadaba, en plena Reserva de la Biosfera de Gran Canaria. Este enorme espacio se reparte entre los municipios de Artenara, Agaete y La Aldea de San Nicolás, desde los cuales se puede acceder a la finca. Esta finca fue comprada por el Cabildo en los años noventa con el objetivo de conservar y recuperar la masa forestal de la isla, fundamental para la recarga del acuífero y para las diferentes formas de vida animal y vegetal, que forman parte del patrimonio natural y son sustento cultural y emocional de la población grancanaria. Se compró siendo un entorno abierto, sobreexplotado y pastoreado en otra época, en el que se han realizado repoblaciones de pinar disperso tanto canario como foráneo. Aún quedan reductos de vegetación termófila como almácigos o sabinas como la de la Casa de la Marquesa, que es el ejemplar de mayor tamaño de Canarias. Se encuentran en Tirma especies como la yerba muda o corazoncillo, el apio marino, y margaritas endémicas de la zona. También se encuentra aquí la mejor colonia de tabaiba parida o tolda, que constituye una de las reservas más importantes de la isla y del archipiélago de esta especie.

También La Finca de Tirma funciona como una reserva para diferentes especies de aves, existiendo importantes colonias de especies que nidifican en sus acantilados. Aves marinas como la pardela cenicienta (Calonectris borealis) o el petrel de bulwer (Bulweria bulwerii) o rapaces como el amenazado halcón tagarote (Falco pelegrinoides), encuentran en estas costas un lugar aislado y tranquilo para reproducirse, un santuario todavía salvaje para los que probablemente estuvieron entre los primeros seres en llegar a las islas, las aves.

Tirma, un lugar sagrado.

En este espacio se encuentra la montaña de Tirma, que da nombre a la finca. Este lugar es uno de los centros arqueológicos más importantes para conocer la historia de los antiguos habitantes de Gran Canaria. Aquí se localizan poblados de casas construidas en torno al llano de Tirma, próximo al Pinar de Tamadaba, que probablemente se basaban en una economía pastoril y agrícola de bajos recursos.

Pero sin duda el lugar más conocido e importante dentro de la vida espiritual aborigen, fue el santuario de la Montaña de Tirma. Esta montaña fue uno de los lugares santos a los que acudían en procesión las harimaguadas para rogar por la lluvia. Cerca de ahí se encuentra la casa aborigen mejor conservada de la isla conocida, que aún conserva sus muros e incluso sus enormes vigas de sabina, que mantienen la techumbre. También, en las laderas de la Montaña de Tirma aparecen varias zonas de inhumaciones funerarias. Es el caso del Llano de la Pimienta, donde se observan diversos túmulos.

Existen más ejemplos arqueológicos dentro de la finca, lo cual conecta la importancia que una vez tuvo este espacio para los habitantes prehispánicos con la importancia que actualmente tiene este espacio en la recuperación natural de los ecosistemas insulares.

- 112 (Emergencias Gobierno de Canarias)

- CECOPIN 928 353 443 (Centro de Comunicaciones del Cabildo de Gran Canaria)

- OIAC 928 219 229 (Oficina de Información y Atención a la Ciudadanía Cabildo de Gran Canaria)